Sin Remitente
En la próxima elección, Morena tampoco tendrá problema para ganar nuevamente la alcaldía de Centro. La mayoría de los nativos del municipio que siguen fieles al presidente Andrés Manuel López Obrador votarán nuevamente por el candidato o candidata que el partido postule, sin importar si la actual alcaldesa Yolanda Osuna realice o no un buen gobierno, como ya quedó demostrado en la elección del 2021 que Morena ganó a pesar de la mala gestión de Evaristo Hernández.
Aunque hasta este momento el aspirante más visible y se pensaría que hasta el que tendría ser es Jorge Bracamontes, lo cierto es que el Centro ha sido históricamente la candidatura de consuelo para quienes no resulten postulados a gobernador o a cualquier otra posición relevante como una senaduría.
Tampoco habría que descartar que el candidato a Centro sea alguien que ni aparece en el escenario público y que como sucedió con Yolanda Osuna Huerta, gane por el solo hecho de que sea nominado por Morena y respaldado por el Presidente.
Sí en otros municipios la oposición podría tener alguna esperanza de ganar, en Centro no tiene alguna oportunidad, y más cuando es la posición más importante después de la gubernatura que Morena no dejará perder.
Para Morena, en todo caso, el mayor desafío será lograr que los grupos al interior que lideran por un lado Adán Augusto López Hernández y por el otro Javier May Rodríguez logren conciliar intereses para que alguno de los dos se quede con la candidatura de Centro, o bien para que acepten un tercero (conocido o no).
Sí la corriente de Javier May Rodríguez logra que Centro sea parte del paquete en el reparto de candidaturas, entonces es casi seguro que veamos como próximo alcalde a Jorge Bracamontes.
En caso contrario, el grupo político de Adán Augusto López Hernández podría optar por la senadora Mónica Fernández Balboa o Mario Llergo, o de alguien que en este momento tenga un bajo perfil y que solo espera que las circunstancias le favorezcan.
Contra quienes vislumbran un choque de trenes, ignoran el rol que el Presidente jugará para que los grupos acepten los acuerdos.
Centro, pues, está ganado, aunque Morena no tenga aún candidato o sus alcaldes hayan sido o sean pésimos, les guste o no a la oposición.
