O dejan al PAN… O nos Vamos: Manuel Gómez Morín lanza un contundente llamado
La Chispa informa entre 30 mil y 40 mil militantes del PAN están dispuestos a abandonar el partido si sus dirigentes no respetan los principios que lo rigen, de los pocos menos de 300 mil que integran el patrón total.
Este alarmante anuncio podría poner a Acción Nacional en riesgo de perder su registro, generando un creciente descontento hacia aquellos que lo tienen “secuestrado”.
La inconformidad dentro del Partido Acción Nacional
Manuel Gómez Morín, nieto del fundador del PAN, expresó su preocupación en una reciente conferencia de prensa. Comentó que hay dirigentes que tiene secuestrado al PAN como Marko Cortés, Jorge Romero y Santiago Creel, a los que se sumó ahora Ricardo Anaya por manejar el partido para su beneficio personal. “O dejan al PAN… O nos Vamos”, declaró, señalando la necesidad urgente de un cambio.
Exigencias de una nueva dirigencia
Gómez Morín exige la suspensión del proceso de elección del próximo Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Acción Nacional. Propone que se designe una presidencia transitoria que limpie el padrón de militantes, el cual, según él, está manipulado en la actualidad.
En su recorrido por el país, dejó claro que no se postulará para la presidencia del CEN, afirmando que “ahora es tiempo de mujeres” y sugiriendo nombres como Carmen Segura Rangel y Eloísa Talavera como potenciales líderes interinas, aunque se pueden revisar otros nombres
La realidad de la contienda electoral
Gómez Morín aclaró que el movimiento “O dejan al PAN… O nos Vamos” no apoya a Adriana Dávila, quien se postula para la presidencia del partido. Afirmó que su candidatura representa una simulación y que debe ser consciente de la situación actual.
“Es crucial convocar a elecciones con piso parejo para todos los aspirantes”, subrayó, añadiendo que actualmente el entorno es desventajoso para muchos.
El dilema de la renovación
La declaración de Ricardo Anaya en favor de Jorge Romero fue calificada como lamentable por Gómez Morín. “No se trata de un movimiento que busque simplemente reemplazar a uno por otro”, enfatizó.
Lo que se necesita es una limpieza real del padrón, que permita que todos los miembros tengan la oportunidad de aspirar a cargos dentro del PAN.
“Que liberen al PAN quienes lo controlan”, insistió. Según Gómez Morín, es vital forzar la suspensión del proceso interno para abrirlo a las bases, un objetivo que ya se ha comenzado a discutir con Romero y Creel.
La crítica a la cúpula del PAN
En un juego de palabras, advirtió que si Jorge Romero llega a la presidencia, sería “el delfín del… fin del PAN”. Sin embargo, expresó su confianza en que su movimiento logrará limpiar al partido y restaurar su integridad.
Gómez Morín resaltó que el padrón de militantes debe ser depurado para permitir la participación de nuevos integrantes que refresquen el partido. “El actual PAN no le sirve de nada a México”, afirmó contundentemente.
El futuro del PAN y sus militantes
A pesar de la posible desbandada, Gómez Morín descartó que los militantes que abandonen el PAN busquen fundar otro partido.
En cambio, mencionó que hay muchas organizaciones de la sociedad civil donde podrían involucrarse, pero enfatizó la necesidad de crear un PAN robusto que pueda hacer frente a Morena.
Los resultados electorales negativos del 2 de junio y las recientes traiciones, como el apoyo de los Yunes a la reforma judicial de Morena, son ejemplos que evidencian la necesidad de un nuevo PAN.
Un llamado a la acción
Gómez Morín enfatizó que no se trata de cambiar el nombre del partido, ya que mantiene cierto nivel de credibilidad ante la ciudadanía, superior incluso al de otros partidos como el PRI, el Verde y Movimiento Ciudadano.
Su gira para ganar apoyo entre los panistas inconformes comenzó en la Ciudad de México y abarcó varias ciudades, incluyendo Chihuahua, Monterrey, y Guadalajara. En la próxima fase, continuará en Villahermosa, Campeche y Mérida.