Un concepto malentendido, y el precio del desdén
Casi todo mundo, incluyendo Yucatán, ha oído alguna vez la expresión de “un venadito que anda por la serranía”, para aludir a una persona que lucha por su vida, con toda la fiereza que se requiere, o a favor de un grupo social. En este caso el que habla y el que escucha no coinciden en el significado de esa imagen ficticia. Podemos decir que algo así le pasó a la columna que hoy le estamos entregando, y que da continuidad a unos breves comentarios que hicimos unas horas antes de que se realizara la elección de gobernador en la cual Joaquín Díaz Mena arruinó los pronósticos de sus detractores.
Como siempre, agradecemos infinitamente la atención que prestan nuestros lectores, amigos y público en general, a esta modesta columna desde la cual seguiremos abogando por que los habitantes de toda la Península participen en la discusión, análisis y solución de los problemas que afrontan los habitantes de toda nuestra Península. Muchas gracias.
ES UN ASUNTO DE TODOS
Tigre y no venadito, se busca capital foráneo, y más armamento
Hasta hace unos meses mucha gente de Yucatán tenía la idea de que el exalcalde de la cabecera municipal y puerto de San Felipe, Joaquín Díaz Mena, era como aquel mítico “venadito que andaba por la serranía”, esquivando las dentelladas y zarpazos de los lobos qué asuelan los montes yucatecos. Ahora muchos de ésos que se equivocaron andan por estos días caminando de un lado para otro en busca de lograr el acuerdo de una reunión con el neomorenista que es el nuevo gobernador.
En parte éstos últimos son representantes del sector privado yucateco, que necesita con urgencia los apoyos en efectivo, en infraestructura, información, insumos, y etcétera.
Así como todos respiramos, así el sector privado empresarial requiere de un entorno amable y propicio para llevar al cabo sus planes de producción y comercialización.
No sería la primera vez que constatemos que sin sector privado, que aporte una buena parte o la mayor parte del capital, que sirve para generar empleos, contrate un préstamo para tratar de salir adelante.
El asunto de los capitales extranjeros, que prácticamente no se han posado sobre el suelo mexicano en todo lo que va de este moribundo sexenio, es otro de los toros de casta a los que tendrá que enfrentarse la Presidenta.
En este sexenio que termina aumentar la presencia de capitales foráneos es uno de los más importantes retos a los que se enfrentará la nueva jefa del Ejecutivo, que tendrá en su contra la serie de desprecios, desdenes y malos modos con que Andrés López trató a los dueños de la riqueza foráneos. A mediados del año pasado aún preguntábamos a destacado abogado de un grupo empresarial sí iban a perseverar en su proyecto energético, y qué es lo que él creía que iban a hacer sus homólogos del extranjero.
–Mira reportero, los inversionistas extranjeros hace rato que se fueron de México. En cambio, nosotros, los que somos de aquí, seguimos esperando para ver si hay un cambio de actitud. Ya si vemos que no hay ninguno en el siguiente sexenio, entonces veríamos qué hacer.
En Yucatán el flujo de capitales extranjeros fue desigual y variable durante el reciente año 2023, en el que el Gobernador aportó un impulso importante que apuntaló la labor que desde el gobierno estatal precedente llevó al cabo el secretario de Fomento Económico, Ernesto Herrera Novelo. Habrá que ver si en este nuevo régimen todavía hay mucha diferencia de por medio, pero quizá ya pueda decirse ahora que Herrera Novelo es lo que el comandante Luis Felipe Saidén Ojeda es a la Secretaría de Seguridad y Protección.
Y a todo esto nadie ha dicho esta boca es mía en el Gobierno del Estado, luego de que se reveló que el presidente López Obrador presentó al Poder Judicial (“su” Poder Judicial) una iniciativa para modificar la Ley de Armas de México. ¿Qué se cambia? ¿Por qué motivos? ¿Qué consecuencias traerá ese cambio legal en un país que tiene como vecino al mayor fabricante y traficante de armamento del mundo? En próxima entrega de esta columna abordaríamos detalles sobre la forma en que esa legislación afecta a los campesinos yucatecos.