Reseña de la última corrida de la temporada en la Plaza de Toros Mérida

Por: Carolina Arellano y Mario Cann

Antes de dar inicio al festejo taurino un grupo de subalternos pertenecientes a la Asociación de Banderilleros realizó un reconocimiento a los empresarios.

Acto seguido cada matador salió al tercio a saludar al respetable, antes de iniciar cabe mencionar que los toros de La Estancia fueron desiguales en juego aunado al viento que no dejo de soplar en toda la corrida, vamos a la crónica.

Primer toro

Sale de toriles, Enamorado, toro para El Payo, algo despistado, al cual el matador se aplica sacando un par de pases con el capote, seguidamente pide el cambio de tercio.

Una puya basta para intentar despertar al despistado Enamorado; en el tercio de banderillas dos pares son suficientes para el astado que continua sin transmisión.

En el tercio de muleta, El Payo con voluntad pero precavido, pues el aire sopla e incómoda al matador, este saca algunos y contados pases del agrado del respetable, pero abreviando su faena, nada que resaltar.

Pasa El Payo a la suerte suprema con un pinchazo, saliendo desprendida esta al pasillo detrás de la barrera, sin consecuencias mayores, un segundo intento y nada,  siendo la tercera la vencida con un estoconazo de tres cuartos para catapultar al nada fácil Enamorado, silencio.

Sale en segundo lugar Gitano, correspondiente al español  Román, un toro castaño de bonita estampa pero de caja pequeña, un toro que tiene muchas patas y no logra su matador someterlo a su capote, solicitando el cambio de tercio,  recibiendo este una puya suficiente para pasar a las banderillas,

en la cual al primer intento el subalterno sale con prisa pues el pequeño Gitano era incomodo, ocasionando risas y silbidos del respetable, nada más que resaltar; brinda el español al respetable,  emocionando los tendidos, derechazos de buena factura ganándose los oles en el graderío,

por la izquierda ejecuta unos pases muy sentidos, viniendo Gitano a menos, hasta que comienza a fijarse en su matador, hasta aplicarle un susto sin consecuencias, pero ya Gitano sabe que tiene al frente, por lo que el matador decide abreviar.

Pincha al primer viaje y hasta el tercer intento logra una estocada en un sitio considerable, pero sin lograr vencer al pequeño Gitano, amorcillándose este en tablas, teniendo que recurrir Román al descabello. Palmas.

En tercer lugar sale de toriles Jinete para Héctor Gutiérrez,

tercer espada y primero en su lote, Cárdeno oscuro, igual que su hermano anterior sale con muchas patas, sometiéndolo Héctor hasta el cuarto intento con el capote,

solicitando el matador el cambio de tercio, en la cual con una puya basta para que Jinete, pase al tercio de las banderillas, la cual resulto  emocionante, siendo sacado al tercio al banderillero para recibir el reconocimiento del respetable.

Durante la lidia de Jinete, el voluntarioso Héctor intenta agradar al tendido, con un astado sin mucho que dar, abreviando su matador, catapultándolo a mejor vida con un buen estoque, para dar fin al astado.

En resumen de la primera parte del festejo, no mucho que resaltar salvo los derechazos de Román a su toro en turno.

Para la segunda parte de la corrida, el aire sigue haciendo de las suyas, dando paso al cuarto de la tarde, segundo en el lote del Payo, de nombre  Mas que Hermano, inicia el matador con el capote logrando un par de pases de mediana factura;

un buen puyazo en buen sitio, no reconocido por el tendido, pasando a las banderillas casi de forma instantánea y de allí de igual manera a tercio de muleta; inicia El Payo por derechazos sin transmitir al tendido, preocupado, el aire sopla

y nunca se logra acomodar, nada que resaltar, abrevia y pasa a la suerte suprema en la cual pincha al primer intento y en el segundo media estocada, sin consecuencias en el astado, recurre al descabello hasta en cuatro ocasiones, provocando en descontento del público, bronca y silencio.

El quinto toro de nombre Calandrio correspondió al matador Román astado berrendo, de bonita estampa, pero sin mayores notas para resaltar, pasa por el albero con pena,  recibe una buena puya y buenos pares de banderillas;

inicia Román su faena por derechazo, está  muy voluntarioso ante un astado que ofrecía poco, decide abreviar y pasar la suerte suprema y con un estoconazo tendido y trasero, no logra catapultar al astado, teniendo que recurrir al descabello para dar fin al bello Calandrio

Damos paso a Duende, sexto y último de la tarde,

un negro zaino de buenas hechuras, lo recibe Héctor Gutiérrez con una larga afarolada rodillas en tierra, emocionando al tendido, un par de pases más de buena calidad recibiendo los oles del respetable; en banderillas poco que resaltar,

pasando al tercio de varas, en la cual se anticipa el español Román, solicitando un toro de regalo, mismo que autoriza el juez Ulises Zapata; en la pica el mismo Héctor se encarga de llevar al astado al caballo, recibiendo duende una buena puya, que es aplaudido por el respetable,

lo prueba Héctor con unas gaoneras de buena factura, alegrando al tendido; en banderillas bien los subarternos, brinda el matador al respetable, iniciando su faena  con derechazos de calidad aprovechando que el astado se prestaba a la lidia, derechazos emocionantes,

naturales de calidad, pasándose el matador los pitones cerca de las carnes de su cuerpo, volviendo loco al tendido, la cual le reconocen con unos oles muy sentidos;

en la suerte suprema Héctor logra una estocada en buen sitio catapultando a mejor vida al buen Duende, ganándose las 2 orejas a pulso, mismos que concede el juez.

Toro de regalo

Sale de chiqueros Habanero, de la ganadería de Vista Hermosa, sobrero, toro negro, largo de caja, no con un excelente trapío, pero si con mucha energía y con la emoción todavía en el tendido del toro anterior, la gente se esperanza de ver una buena faena del voluntarioso matador Román.

Nada que mencionar con el capote, el toro corre mucho y no logran bregarlo como se debe, pasan al tercio varas, el alegre Habanero recibe una buena puya pero en el terreno contrario, esto por anticiparse durante la brega;

un tercio de banderillas con buen sabor de boca, pasando al tercio final, brinda el español Román al respetable, tratando de complacerlos; inicia su faena con unos buenos derechazos, continuando con la esperanza del respetable de un buen cierre pero el español Román no logra cuajarla al no acomodarse con el alegre e incómodo Habanero.

El matador decide abreviar con una estocada en buen sitio pero sin lograr pasaportar al astado, un pinchazo en el segundo intento, sin mayores resultados,  teniendo que recurrir al descabello para terminar con Habanero.

Cabe mencionar que el triunfador de la tarde fue Héctor Gutiérrez con las 2 orejas ganadas a pulso, triunfa con mucha fuerza por segunda tarde en nuestra plaza.

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