ORACIÓN “CUANDO NOS OLVIDAMOS DE DIOS, ¡HACEMOS LO MALO!”

Padre Providente: ¡Feliz e increíble día tengas Tú en Tu Reino Celestial! ¡No cabe duda que Tú, oh Padre Santo, nos pones a prueba para fortalecer nuestra fe, nuestro carácter, nuestro amor, nuestra esperanza y nuestra fidelidad! Cuando SITIS, la esposa de Job, vivió en la abundancia, fue fiel y creyente, más cuando llegó la prueba y vio la ruina de su esposo, perdió la fe e incitó al mismo Job a que maldijera y se apartara de Dios, reprochándole con ira: “—¿Todavía mantienes firme tu integridad? ¡Maldice a Dios y muérete!” (Job 2:9).

Padre Santísimo: Tú nos pruebas a todos sin excepción, porque este mundo es EL CRISOL DE LA CERTIFICACIÓN, cuya duración es mínima comparado con la eternidad bienaventurada en el día sin ocaso del Reino celestial. Es por ello que, NECESITAMOS RECOBRAR NUESTRA CONCIENCIA DE ESTA REALIDAD INELUDIBLE Y MANTENERNOS SIEMPRE EN LA DIVINA PRESENCIA PARA PODER RESISTIR TODAS LAS PRUEBAS A LAS QUE TÚ NOS TENGAS QUE SOMETER.

El tener EL DON DE LA VIDA, es tener la aptitud para que, cual brotes de olivo, ¡JAMÁS INTENTEMOS SEPARARNOS DEL TRONCO DE LA VIDA! La gran verdad es que: SIN TI, OH PADRE SANTO, ¡NADA PODEMOS HACER! Tu amado Hijo nos lo enseñó, al decirnos con el poder de Su Palabra de Vida: “Ciertamente, Yo soy la vid; ustedes son las ramas. Los que permanecen en Mí y Yo en ellos producirán mucho fruto porque, separados de Mí, ¡no pueden hacer nada!” (San Juan 15:5).

¡Qué tremenda verdad ineludible! ¡Todos sin excepción tenemos que pasar esta prueba del crisol divino! Pero el secreto para superarla es EL PERMANECER UNIDOS A CRISTO Y A TENERLO EN NUESTRO INTERIOR PARA QUE, FORTALECIDOS EN ÉL, TENGAMOS SU MENTE Y SU FORTALEZA DIVINA PARA QUE NUESTRA PRUEBA SEA MARAVILLOSAMENTE EXITOSA. ¡CONVENZÁMONOS DE UNA VEZ POR TODAS QUE SEPARADOS DE ÉL NADA VAMOS A REALIZAR CON ESE ÉXITO DESEADO, PORQUE CRISTO ES LA VID Y NOSOTROS SOMOS LAS RAMAS!

Padre Bendito: cuando vemos a nuestra humanidad que vaga por el mundo sin ni siquiera pensar en Ti, desconociendo el Evangelio de vida que nos lleva a injertarnos a Cristo, Tu Hijo Amado para ser una rama podada, cuidada y fructífera, comprendemos que todos sin excepción, necesitamos SER HERALDOS DEL MENSAJE SALVADOR para traerlos a Cristo y así, en Él, sean benditos, seguros de sí mismos y aptos para poder resistir las tremendas pruebas de la vida.

Dina, la segunda esposa de Job, hija de Jacob, vino a gozar lo que SITIS, perdió por su impaciencia, su infidelidad y su debilidad, que no fortaleció con la constante presencia divina y con la oración en compañía de su esposo. Padre Santísimo: “JOSÉ EL SOÑADOR”, es otro ejemplo de UN HOMBRE PROBADO EN TANTAS CRUELES CIRCUNSTANCIAS, QUE HCIERON DE ÉL UN HOMBRE EXITOSO, PORQUE, ¡JAMÁS SE SEPARÓ DE TI! CON ELLO DEMOSTRÓ QUE, AUNQUE SUS HERMANOS LO ODIARAN, LO MALTRATARAN Y HASTA LO VENDIERAN PARA DESHACERSE DE ÉL, TU PRESENCIA Y TU BENDICIÓN LO LLEVARÍAN A REALIZAR TODOS SUS SUEÑOS.

¡Gracias, Padre Bendito! Ahora comprendemos que este mundo es el crisol en el que nos preparas para UNA VIDA EXITOSA, fortaleciéndonos con LA PRESENCIA DIVINA EN NUESTRO INTERIOR, TENIENDO LA MENTE DIVINA DE CRISTO Y EL PODEROSO IMPULSO DEL ESPÍRITU SANTO.

¡Bendito seas, Maravilloso Dios de nuestros amados padres! Amén.

P. Cosme Andrade Sánchez+