Tiempo de montajes
Triques
Por José García Sánchez
La consigna de los medios convencionales radica en no cubrir eventos de las diferentes dependencias del actual gobierno para hacer un hueco informativo y que parezca que no hacen anda. Es decir, a pesar de que las autoridades de la SEP, de Segob, de Economía, de Salud convocan los medios no asisten y no publican nada de lo que sucede en esas dependencias y en todo el gobierno federal.
Prefieren ocupar sus espacios destacados a famosos y deportistas antes que difundir noticias serias y trascendentes.
Desde la llegada de Luis María Alcalde a la Secretaría de Gobernación, se mostró un gran descontento en los medios convencionales ya que, para ellos, la nueva encargada de la política interna tenía dos graves defectos: es mujer y es joven. A partir de ese momento, llovieron críticas por defectos que buscaron en sus más delirantes fantasías y se creó rencor misógino inexplicable que tiene ahora consecuencias poco civilizadas.
Este es el caso del montaje que se realizó entre actores amateur y algunos medios convencionales de derecha, que nunca cubren la fuentes que deben cubrir y, en esta ocasión, casualmente coincidieron en asistir afuera de la Segob, donde no se da a conocer ninguna de las informaciones oficiales de la dependencia.
De esta manera, ni siquiera requieren acreditación porque las acciones se desarrollaron en la calle. De esta manera, necesitaron un espontáneo que saltara a la calle para detener el paso de la camioneta donde viajaba la secretaria de Gobernación, cosa que impidieron los guardias de esa dependencia.
La necedad de esta persona que se autodenominó víctima de maltrato de militares en 2009, es decir, cuando era Presidente Felipe Calderón, de inmediato los teléfonos de los comunicadores ahí concentrados empezaron a grabar el hecho, con una narrativa evidentemente tendenciosa, imponiendo criterios respecto a las causas del enfrentamiento y asegurando que se golpeaba a una víctima. El guion estaba preparado y redactado con anticipación.
Esto si hubiera sucedido en sexenios anteriores le hubieran disparado al actor, cosa que buscaba para desacreditar a Luisa María Alcalde y a la 4T, calificando de represivo el acto. Las circunstancias pudieran justificar este hecho.
Por otra parte, Ebrard empieza a hacerle competencia a Loret en cuanto a la elaboración de montajes se refiere. No hace falta ser un profundo analista del discurso ni explorar la personalidad del ex canciller para conocer al autor intelectual de la propaganda que apareció en Nueva York, en la esquina del Times Square, donde aparecen varis fotos de Claudia Sheinbaum en abierta propaganda electoral.
La aparición de Claudia en el noticiero exterior, con Carlos Ulloa, secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda del gobierno de la capital, tiene la intención de que todos lo consideren el autor de dicha difusión, cuando en realidad se trata de una trampa que de tan burda sólo cuestiona el nivel intelectual de la gente del ex secretario, con el objetivo de que haya una sanción como la que se llevó a cabo contra Félix Salgado Macedonio, es decir, que le quiten la candidatura y entonces pueda llegar el segundo, o sea Marcelo.
El autor de esta trampa, fue el ex colaborar de Marcelo, Elías Miguel Moreno Brizuela, porque quienes aparecen en el video “me caen muy bien”. Vaya ingenuidad de u político avezado.
Al igual que el montaje anterior, cuando el video apareció la denuncia ante el tribunal electoral y su correspondiente difusión en los medios del PAN ya estaban elaboradas. Prácticamente se actuó al mismo tiempo, sabemos que los panistas no son precisamente ágiles en la elaboración de denuncias ni en la convocatoria a los medios; esta vez fue la excepción porque sabían de antemano lo que sucedería.
También coincidían en la necesidad de convertir en verdad los montajes. El primero, de represión; el segundo, de acto adelantado de campaña.
Llama la atención que la derecha estuviera avisada por una acción de una persona que sigue siendo morenista como lo es Marcelo.
La competencia por la candidatura de Morena fue adoptada por los seguidores de Marcelo como una guerra a muerte contra Claudia Shienbaum, así lo demostraron desde el primer día. La saña propia de quien quiere destrozar una imagen, se mostró en los medios y las redes al alcance de estas personas.
En estos montajes, los medios, la derecha y los traidores actúan conjuntamente como sucede en la víspera de los golpes de Estado legaloides.