Cuba en Tuxpan

Triques

Una de las batallas que debe librar la Revolución Cubana desde el inicio de sus luchas es la tergiversación de los medios, que se encargaron de desvirtuar una lucha popular como si se tratara de una plaga letal o de un camino al infierno.

Así, se aseguraba que luego dela Revolución Cubana se comían a los niños porque no tenía para comer, que se asesinaba a los curas porque estaban contra toda religión y que a los disidentes se los aventaban a los tiburones en alta mar.

Los niños en Cuba son felices, más que en otros países porque en la isla tienen garantizada la vivienda, la salud y la educación gratuita. Hay grupos de niños defensores de la revolución llamados Colmenitas que van a lo largo y ancho del territorio cubano defendiendo la causa.

En la isla se practican todas las religiones que tienen que ver con sus ciudadanos, desde la yoruba hasta la católica pasando por una serie de religiones auxiliares que ahora invaden el mundo.

La mayoría de los disidentes tienen cuentas pendientes con la ley, en su mayoría como delincuentes comunes o bien contribuyen de manera violenta y fuera de la ley a sabotear con bombas, asesinatos, asaltos, desapariciones a los defensores de la revolución, por eso son perseguidos y encarcelados, no por pensar diferente.

A pesar de que mucha gente sabe de la tarea constante de tergiversación respecto a la Revolución Cubana sigue creyendo en los grandes corporativos de información que sostienen a los medios convencionales en México.

Cuba tiene tanta defensa popular que hasta le alcanza para apoyar en territorio cubano, a la Cuarta transformación. Son ciudadanos convencidos de los beneficios del gobierno actual mexicano y se expresan a favor dentro y fuera de su país. En la isla una mujer cubana encabeza los Comités de defensa a la Cuarta transformación en México, esta tarea valiente y heroica está en manos de Inés Limonta, desde la isla.

Ese lazo de hermandad con México tiene muchos años, su apoyo mutuo tiene muchos años, es, prácticamente una tradición desde mediados del siglo pasado, cuando en 1956 salen en el yate Granma de Tuxpan, Veracruz 82 expedicionarios para derrocar al régimen de Fulgencio Batista.

El punto de partida fue el lugar que ahora ocupa el Museo Hermandad México-Cuba, antes Museos de Amistad México-Cuba, fundado el 19 de febrero de 1976. En 19656 la casa estaba abandonada y la arreglaron los expedicionarios para vivir ahí antes de partir a la Sierra Maestra, cada rincón está impregnado de un trozo de historia.

Fidel Castro, en una visita a México, cede la casa a la comunidad de Santiago de la Peña, en Tuxpan, que se convierte en museo. Finalmente, el inmueble es dado en comodato a la historia. La comunidad estuvo representada por el presidente municipal de Tuxpan, José Manuel Pozos Castro, quien comentó sobre dicho recinto que “sirvió de génesis para uno de los hitos más significativos del siglo XX, como fue la Revolución Cubana”.

Añadió Pozos: Este museo “es punto de encuentro de quienes pensamos que las injusticias y las desigualdades sociales y económicas en el mundo se pueden erradicar”.

Entre los expedicionarios del Granma estuvieron, además de Fidel Castro, Che Guevara, Raúl Castro, Camilo Cienfuegos, Juan Almeida Bosque y Ramiro Valdés, entre quienes se encontraba el mexicano Alfonso G. Zelaya Alger, cuyo busto se exhibe en dicho museo.

Nadie puede juzgar al sistema de la Revolución Cubana porque nunca ha desarrollado el gobierno que desea, debido al embargo de Estados Unidos que desde 1962 lo ha impedido, lo inició el gobierno blandengue de John F. Kennedy, quien se dejaba mandar por la mafia cubana en Miami, y sigue vigente como muestra del temor ante la libertad de los pueblos y la ambición de la hegemonía, y le impide vivir como ellos quieren, pero les impone carencias homicidas.

Difícil saber cómo es el sistema de gobierno en la isla si no dejan a sus dirigentes ejercer el poder que mandatan sus ideales. El embargo, además de ser un acto de lesa humanidad porque impide la entrada de medicinas y alimentos, es una advertencia a otros países para que no les ocurra hacer lo mismo, pero, sobre todo, un sabotaje a formas de gobierno diferentes a las que demostraron su inoperancia y decadencia.

México y Cuba acaban de suscribir acuerdos, a través del embajador de Cuba en México, Marcos Rodríguez Costa y el alcalde de Tuxpan José Manuel Pozos Castro, los cuales tienen una gran tarscendencia por sus alcances internacionales en temas educativos, de arte y cultura.

La prensa internacional de Cuba destacó este encuentro que se dio en el marco de una visita del cuerpo diplomático cubano al Museo de la Hermandad México Cuba, donde se conmemoró un aniversario más de la partida del yate Granma.

La relación con el gran país del Caribe es permanente y cada vez más cercana.