Día Internacional de la Mujer Indígena
Se estima, que actualmente sufren una triple discriminación
El 5 de septiembre fue la fecha elegida para instaurar el Día Internacional de la Mujer Indígena. Celebración que nació durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América reunido en Tihuanacu, Bolivia, en 1983.
La idea era dar reconocimiento a todas las mujeres indígenas valientes que han jugado y seguirán jugando un rol importante en la pervivencia de la cultura de sus tribus, así como su lenguaje y fuerza de carácter.
Actualmente se calcula que solo en Latinoamérica existen alrededor de 522 pueblos indígenas y que en total la población sumaría 42 millones de personas. De ese gran número redondo el 59% son mujeres, es decir, más de la mitad; y sin embargo, son el sector más oprimido tanto de la sociedad tribal como de la sociedad en general.
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Día Internacional de la Mujer Indígena en Yucatán
En el caso de Yucatán, existe una gran reivindicación de las garantías de la población indígena, como resultados de los procesos de lucha que hubo en el estado, más de 30 durante la época de la Colonia. Así como otros más que han sido de gran valía para las mujeres, como el reconocimiento que se hizo en el gobierno de Felipe Carrillo Puerto para que pudieran votar y ser votadas en 1921. Esto 30 años antes de esto se diera en todo el país.
Se estima, que la mujer indígena actualmente sufre una triple discriminación:
- La primera se debe solo a su género. La mayoría de los pueblos indígenas son machistas, por lo cual les privan a las niñas su educación e incluso, muchas de las prácticas de apareamiento en algunas de estas culturas contemplan la violación.
- La segunda discriminación se debe a su condición de indígenas, muchos países ven al indígena como un ciudadano de segunda clase.
- Y la situación empeora con el tercer nivel de discriminación, que es la pobreza, aún en pleno siglo XXI muchas mujeres indígenas no pueden ser dueñas de la tierra donde viven y trabajan, sino que esta pertenece al hombre de la casa, al que deben pedir permiso para trabajarla e incluso tomar lo cosechado.