Exigen justicia para Rufo perrito decapitado en Chuburná
Un grupo determinado de mujeres rescatistas de animales ha protagonizado una manifestación frente a las instalaciones del Centro de Justicia Oral de Mérida exigen justicia para Rufo.
Su protesta tiene lugar momentos antes del inicio de una audiencia crucial relacionada con el caso de “Rufo”, el perrito que trágicamente fue decapitado en Chuburná en agosto del año pasado.
Estas mujeres, con un firme propósito de búsqueda de justicia, alzaron la voz en medio de la preocupación y el temor de que el acusado en este caso, J. C. P. E., pueda quedar en libertad al concluir la audiencia del día.
En un llamado apasionado a las autoridades, expresaron su demanda de justicia para “Rufo” y exigieron que el presunto responsable, quien actualmente se encuentra detenido, reciba la sanción correspondiente en forma de tiempo tras las rejas.
Después de llevar a cabo una breve pero impactante manifestación con lonas a las puertas de los juzgados, las mujeres activistas y rescatistas ingresaron al edificio en busca de acceso a la audiencia intermedia pública.
Exigen justicia para Rufo alzaron la voz en medio de la preocupación y el temor de que el acusado pueda quedar en libertad
En este crucial evento, se espera que las autoridades ministeriales presenten pruebas sustanciales para avanzar en el proceso legal contra el individuo vinculado.
Es fundamental recordar que el incidente que desencadenó este proceso judicial ocurrió el sábado 12 de agosto en una residencia de la colonia Chuburná de Hidalgo.
Vecinos alarmados informaron que observaron a J. C. P. E. intentando enterrar el cuerpo decapitado del animalito.
Lo que llevó a una pronta intervención de las autoridades y del grupo de mujeres rescatistas de animales, lideradas hoy por la señora Elsa Arceo.
Con pancartas y demandas enérgicas, activistas y rescatistas independientes se plantaron en las puertas del Centro de Justicia Oral de Mérida para hacer eco en favor del pequeño “Rufo”.
Antes de la audiencia que seguirá de cerca el caso del lomito mutilado, los manifestantes instaron al juez a mantener la medida de prisión preventiva, argumentando que el individuo representa un peligro para la sociedad.
Su presencia y demandas destacan la importancia de abogar por la justicia en casos de maltrato animal y la necesidad de garantizar la seguridad y el bienestar de la sociedad.