Gibrán es un talentoso jaranero originario de Yucatán, quien difunde la tradición de la jarana en Canadá y a nivel global.
Gibrán es un talentoso jaranero originario de Yucatán. La jarana yucateca, un tesoro de la rica tradición cultural mexicana, encuentra su voz y representación en tierras lejanas
gracias a la pasión y dedicación de Luis Gibrán Can Cab, un talentoso jaranero que ha llevado el arte de este baile típico a Canadá y más allá, trascendiendo fronteras geográficas y culturales tiene 30 años de edad.
Originario de la comisaría de Santa Teresa Coahuila, en Maxcanú, México, Gibrán posee una formación académica como maestro de primaria.
Sin embargo, su destino tomó un giro inesperado cuando la jarana cruzó su camino, brindándole una oportunidad única en la vida.
Desde hace aproximadamente dos años, Luis Gibrán reside en Canadá, donde se ha convertido en un embajador de la jarana yucateca, compartiendo su pasión y destreza en diversos escenarios en Toronto.
Gibrán es un talentoso jaranero originario de Yucatán
Pero su talento no se limita a la jarana yucateca; Gibrán es un apasionado defensor de la diversidad cultural de México y, por lo tanto, también se presenta
con otros bailes folclóricos representativos de distintas regiones del país. Desde los vibrantes sones jaliscienses hasta los sensuales ritmos veracruzanos, pasando por las enérgicas danzas de Hidalgo
y Tamaulipas, Gibrán Can Cab es un auténtico polifacético de la danza mexicana, llevando la esencia y la alegría de estas tradiciones a audiencias internacionales.
En Canadá, Luis Gibrán es parte integral del Ballet Puro Mexicano, un grupo conformado por otros compatriotas que comparten su amor por la cultura mexicana.
Juntos, este conjunto de talentosos artistas mexicanos se esfuerza por enaltecer y preservar las raíces culturales de México,
promoviendo la comprensión y el aprecio por la riqueza de su patrimonio folclórico.
A través de la danza y la música, Luis Gibrán Can Cab y el Ballet Puro Mexicano han creado un puente cultural entre México y Canadá, demostrando que el arte puede superar las barreras geográficas
y unir a las personas en la apreciación de la diversidad y la belleza de las tradiciones culturales. Su dedicación y pasión por la jarana y otros bailes folclóricos mexicanos
sirven como un ejemplo inspirador de cómo el arte puede ser un medio para promover la comprensión y la amistad entre naciones,
y cómo la cultura mexicana continúa floreciendo en todo el mundo gracias a individuos como Luis Gibrán Can Cab.
Gibrán dio a conocer que le gustaría vivir totalmente en Canadá, y que incluso habla muy bien el inglés. Además de que fácilmente se adaptó al clima muy frío que prevalace la mayor parte del año en esa nación.
Su maravillosa experiencia de vida le ha permitido recibir la invitación para brindar conferencias en Yucatán, donde habla a estudiantes acerca de cumplir las metas y alcanzar los sueños.
Lo pueden seguir en todas las redes sociales con su nombre, Luis Gibrán Can Cab, donde podremos observar cómo baila jarana en los sitios más emblemáticos de Toronto, Canadá. Fotografías: Luis Gibrán Can Cab.