Observatorio genómico de la UNAM único en su tipo ubicado en Yucatán
El Observatorio Genómico de la Costa de Yucatán, único en su tipo. Este fue creado por expertos de la Facultad de Ciencias de la UNAM, campus Sisal. Este observatorio permitirá revelar la riqueza de microorganismos que posee este sitio, así como el potencial genómico presente en ellos.
Además mediante la flora y la fauna, el observatorio permitirá conocer las comunidades microbianas que viven en el área costera yucateca.
El titular del proyecto, Mario Alberto Martínez Núñez, explicó que la finalidad a mediano plazo es generar herramientas moleculares para detectar de forma temprana la presencia de contaminantes en la zona. Además de aprovechar el potencial biotecnológico presente en los microorganismos que la habitan.
Cabe mencionar que el titular de proyecto es considerado por la revista Nature Biotechnology como uno de los jóvenes investigadores más prometedores del mundo.
El investigador de la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación (UMDI-Sisal) dijo que él realiza desde 2017 el monitoreo de forma aislada. Pero gracias a la creación del observatorio podrán revisarse las variaciones en las comunidades microbianas constantemente en época de secas y tiempo de lluvias. Las cuales son las estaciones más contrastantes en el país.
Adicionalmente, el observatorio genómico de la UNAM monitorean lugares donde viven bacterias extremófilas. Como son las salineras de Celestún y Las Coloradas, cuya información se integrará al Observatorio.
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Observatorio genómico de la UNAM útil para la industria farmacéutica
También se mencionó que también será posible identificar genes de gran utilidad para las industrias cosmética. Pues ya se han encontrado enzimas capaces de reparación del ADN dañado por los rayos UV.
También se pueden encontrar péptidos no ribozomales altamente valorados en la industria farmacéutica. Esto para el desarrollo de fármacos como antibióticos que permitan combatir a las bacterias que son resistentes a medicamentos tradicionales.
El trabajo de Martínez Núñez también recibe financiamiento de la Oficina de Investigación Naval (ONR, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. Y se centra en la búsqueda de nuevos chasis para la biología sintética obtenidos de los microbiomas de la zona costera de Yucatán.