Empresarios regatean financiamiento a Huacho Díaz
Por Alejandro López Munguía
El candidato a gobernador por Morena en Yucatán no ve lo duro sino lo tupido. En medio de la grave crisis política que vive el partido por la ausencia del liderazgo oficial, las imposiciones de candidatos en favor de “chapulines”, la llegada a su campaña de una camada de priístas señalados por la corrupción de los gobiernos en los que participaron, la imposición de Rommel Pacheco como candidato a Mérida, ahora se suma la reticencia de los empresarios poderosos a otorgarle financiamiento.
Y es que, los dueños del dinero en la entidad no ven con buenos ojos la forma en la que Huacho está manejando su campaña. Fundamentalmente desconfían de la gente de la que se ha rodeado el candidato morenista y han descartado la victoria del candidato de Morena como algo “seguro”. Huacho solo ha sabido generar entre los empresarios incertidumbre y desconfianza, al crear un clima de enfrentamiento y división en el ejército morenista, que impacta negativamente en la sociedad yucateca.
El desprestigio de esa gente “chapulín”, y la mala decisión de imponer a Rommel Pacheco son factores que al analizarlos generan grandes dudas e incertidumbre en los empresarios. Muchos de ellos ya habían comprometido su apoyo económico al de San Felipe, pero al final se arrepintieron.
Sin dinero, la campaña de Huacho Díaz naufraga, pues lo poco que tienen se esfuma como humo, como agua entre las manos.
Se calcula que la campaña política le costará a Huacho cerca de 5 mil millones de pesos, los cuales está lejos de conseguir.
El problema es grave, toda vez el ejército morenista no cuenta con recursos para movilizarse y la promoción al voto se está haciendo con el favor de aportaciones que la gente hace. Sin embargo, el desgaste es tal, que ya la gente se ha cansado de aportar y los preparativos se han casi detenido.
La inconformidad por las imposiciones de candidatos a presidentes municipales y diputados es tal, que los colaboradores espontáneos desaparecieron y dejaron de aportar sus recursos.
Lo único que le queda a Huacho, es el esfuerzo de sus leales en Bienestar que siguen trabajando, visitando a los beneficiarios de los Programas sociales.
El panorama es muy complejo para él, ha hecho tantos compromisos que le serán imposibles de cumplir.
Le urge el financiamiento. Lo que tiene, no le da.