“El Congreso de Yucatán tiene su dama de hierro”
El Nómada
Por condición natural, si hay que tomar a un diputado para que sea la cara visible del Congreso del Estado, este sería el panista Víctor Hugo Lozano Poveda por fungir como el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política. Además, la hoja de vida del también coordinador de la bancada de Acción Nacional revela su experiencia en esas lides. Sin embargo, aunque no tenga tal cargo, hay una mujer que ha sido el bastión de la bancada más numerosa del Poder Legislativo y ha sido la mano derecha de su coordinador: Carmen Guadalupe González Martín.
Quizás, para los que no están tan empapados del tema político, su nombre no tiene el mismo impacto en los medios de comunicación como varios de sus compañeros, como el ex líder estudiantil y ex regidor del Ayuntamiento de Merida, Jesús Pérez Ballote o la ex competidora olímpica, Karem Achach Ramírez. Pero ella, Carmen Guadalupe, es una de las guías de estos legisladores y de los otros de la bancada.
La panista, abogada de profesión, fue la encargada de presidir la Comisión más importante del Congreso, la de Puntos Constitucionales y Gobernación. Es decir, cada reforma a la Constitución de Yucatán pasa por las manos de esta mujer que se ha convertido en una especie de «Dama de Hierro».
De las reformas a la Constitución que ha presentado el mandatario Mauricio Vila Dosal, como la reforma a la ley del notariado, o la del Poder Judicial, ella ha sido la encargada de analizar el tema y defenderlo en tribuna. Además, ha presentado sendas iniciativas para reconocer los derechos de los adultos mayores y de la juventud.
Las miradas que delatan
La representante del distrito XIII (13) es de un saludo cálido y una sonrisa amable que van en contra del pseudónimo que le hemos colocado en estas líneas y en su función en el Congreso del Estado. Sin embargo, en los trabajos de comisiones y en las mismas sesiones del pleno, cuando otro diputado o diputada toma la tribuna para encender un debate en uno de los temas que ha pasado por sus manos, la legisladora no se esconde ni se amilana por un verbo encendido. Aunque no pide de nueva cuenta la palabra, sí logra clavar su mirada hacia el interlocutor. Hasta me atrevería a decir que ni parpadea.
Incluso, los trabajos de diálogo con otras bancadas, también en ocasiones, los hace con la mirada.
Incremento del kilometraje
Al ver las fotos de sus redes sociales, se puede apreciar que el kilometraje de su coche va a la alza. En los días que no hay sesión de trabajo, González Martín aprovecha el tiempo para visitar los municipios que abarca su distrito. La semana anterior, estuvo en el pleno el día miércoles, el jueves estuvo bailando en Maxcanú y luego el viernes estaba presidiendo en la ciudad de Mérida, la Comisión de Puntos Constitucionales. “Y yo soy la que manejo” confesó la legisladora.
Cumplir con su trabajo legislativo y visitar constantemente su distrito es el «deber ser» del trabajo de un legislador. Pero especialmente de los diputados y diputadas que ven el Congreso como trampolín para otro cargo. Es aquí cuando se hace compleja descifrar la intención de la “Dama de Hierro”. No se le conoce pretensión alguna de querer ocupar un cargo más alto. Incluso, por ser también la “Dama” de su esposo y sus hijos, tampoco desea alejarse de Yucatán con un cargo federal. De ser así, está dando el ejemplo de lo que debe ser un LEGISLADOR y no un mercadólogo de la política.