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La misteriosa antigua Civilización de los Shu

La misteriosa antigua Civilización de los Shu

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La misteriosa antigua Civilización de los Shu

Podemos conocerla al visitar las Ruinas de Sanxingdui en la Provincia Sichuan que es una de las zonas más antiguas de China, es tierra de la abundancia, con grandes riquezas naturales. El comienzo de la civilización humana se remonta a hace 25,000 años, y el nacimiento de la antigua y gloriosa civilización de los Shu se remonta a finales del periodo Neolítico alrededor del año 3,000 A.C..

Los grandes descubrimientos arqueológicos de Sanxingdui y las Ruinas de Jinsha en el siglo XX son argumentos elocuentes de que la llanura de Chengdu fue el origen de la civilización del río Yangtzé superior y parte importante de los múltiples factores que integran el origen de la civilización china, desde su descubrimiento se han encontrado una gran cantidad de artefactos exquisitos, magníficos, majestuosos y sagrados hechos de bronce, oro, jade y cerámica que ostentan profundas características regionales que forman la representación única de supervivencia del magnífico mundo espiritual de los antiguos antepasados de Sichuan, que nos dejaron pruebas de su extraordinaria e increíble creatividad artística .

La antigua civilización de los Shu representa las características de la integración multicultural, destacándose como la civilización de bronce en China, Asia Oriental e incluso el mundo. Las Ruinas de Sanxingdui están ubicadas en la orilla sur del río Yazi al noroeste de la ciudad de Guanghan, a 40 kilómetros al sur de Chengdu que es la capital de la provincia de Sichuan, y a 7 kilómetros al este de la ciudad de Guanghan.

Las Ruinas de Sanxingdui están distribuidas en un área de 12 km2, siendo la ruina de mayor rango, la de mayor antigüedad y de la connotación cultural más rica. Las ruinas de Sanxingdui es una ciudad metropolitana del antiguo reino Shu, el centro de la civilización de aguas arriba del río Yangtzé o Rio Amarillo es cuna de la civilización china, y es considera como el “origen de la civilización del río Yangtzé”.


Las ruinas de Qingguanshan se encuentran en la orilla sur del río Yazi y cubre un área de más de 1,000 m2, es un sitio donde yace el único edificio que era palacio o templo de la dinastía Shang con el área más grande que se ha encontrado en las ruinas de Sanxingdui.

Las ruinas de Jinsha se ubican al noroeste de la ciudad de Chengdu, en la Provincia Sichuan, en un área de más de 5 km2. Aquí se han descubierto el sitio base de la construcción a gran escala de los lugares de sacrificio, viviendas y cementerios; además se han desenterrado decenas de miles de preciosas y valiosas piezas hechas de marfil, oro y jade, que presentan características distintivas de la antigua cultura Shu, que indican que las Ruinas de Jinsha la ciudad metropolitana del antiguo reino Shu alrededor de 1200 a. C. al 650 a. C., fue centro político, económico y cultural establecido por los antepasados Shu en la llanura de Chengdu, después de la civilización Sanxingdui.

Las piezas arqueológicas más prominentes y valiosas son: “La máscara de ojos prominentes de cobre”, “El árbol divino de bronce”, “La jarra de cobre con patrón zoomorfo de cabezas de carneros”, la figura zoomorfa de piedra “El tigre de piedra”, “El Aro de oro del dios sol con sus aves divinas”, esta exquisita y fina pieza es el símbolo de la ciudad Chengdu, es un patrón que en la capa interna está distribuido equidistantemente con doce rayos solares rotativos en forma dentada, la capa externa está compuesta por cuatro aves fénix idénticos que vuelan en sentido anti-horario. Es símbolo del patrimonio cultural chino y también tesoro cultural nacional.

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En esa región había pueblo llamado Shu, y cuenta la leyenda que los lugareños vivían una vida feliz como en un paraíso, pero un día, el sol desapareció de manera extraña, todo cayó en la oscuridad en un instante y los cuatro ancianos sabios del pueblo se embarcaron en un viaje para encontrar el sol. El primer día, llegaron al bosque y vieron la luna, que los llevó a encontrar al gran mago que había capturado el sol, para ello la luna les dio una misteriosa caja con un tesoro. El segundo día, llegaron a la cúspide de las montañas y vieron las estrellas, que las mismas les obsequiaron una bolsa de tela y les dijeron que podían abrirla con la caja del tesoro.

Al tercer día, llegaron al río Jinsha y finalmente encontraron al gran mago y al sol capturado, por lo que abrieron apresuradamente la bolsa de tela de la que salieron deslumbrantes luces doradas, por lo que el mago no pudo abrir los ojos, seguidamente abrieron la caja con el tesoro, que contenía cuatro cuerdas doradas, que se las arrojaron al mago, estas fueron en dirección hacia los 4 puntos cardinales y con ellas ataron al mago y así el sol se salvó con éxito. Pero, para evitar que el sol fuera a desaparecer por cualquier otra razón, los cuatro ancianos se convirtieron en cuatro aves doradas divinas que protegen al sol desde ese entonces, por siempre.

Como resultado, el sol emitió doce rayos dorados mágicos y deslumbrantes, que hizo que la gente de Jinsha volviese a ser feliz y en retribución el pueblo Shu talló esta lámina de oro como símbolo, que después también se grabó en una variedad de artefactos y hasta el día de hoy lo siguen luciendo con orgullo.

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