“Una ley de movilidad que no movió a todo el PAN”
El Nómada
Recientemente, Mérida fue la sede de un Congreso Nacional de Movilidad. Ahí se dijo que era necesario unificar los criterios de movilidad en las 32 entidades federativas y que México tenía que dejar de ser varios países en uno. En ese sentido, se recordó que la Ley Federal de Movilidad que se discutió en San Lázaro fue aprobada por unanimidad al unificar los criterios de las diferentes fuerzas políticas que conforman el Poder Legislativo de la nación.
El presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso Estatal, Víctor Hugo Lozano Poveda y el propio Gobernador, Mauricio Vila Dosal, llegaron a externar que esperaban que en Yucatán ocurriera lo mismo, es decir, que se aprobara la iniciativa sobre este tema con el consenso de todas las agrupaciones políticas. Pues, esto no ocurrió.
El primer indicio que el proyecto de la Ley de Movilidad no contaba con el apoyo de todos los agentes políticos de la entidad ocurrió el pasado lunes y desde las filas del propio Acción Nacional.
El alcalde de la ciudad de Mérida, Renán Barrera Concha, negó tres veces antes que cantara un gallo la Ley de Movilidad. En la rueda de prensa para presentar el plan «Muévete Mérida» al primer edil de la capital yucateca se le preguntó en tres ocasiones si su plan para los primeros cuadros de la ciudad tenía como intención armonizar el reglamento con la venidera ley estatal. Luego que no respondiera en las dos primeras ocasiones, a la tercera recordó que la movilidad en el centro de Mérida es competencia de la autoridad municipal.
Dos ausencias que pudieron pesar
El sexto periodo extraordinario en el Congreso de Yucatán para discutir la ley de movilidad contó con dos ausencias y ambas provinieron de las filas de Acción Nacional: Esteban Abraham Macari y Karen Achach Ramírez.
Es decir, si sacamos una conclusión rápida sin agregarle mucha materia gris, eso se tradujo en dos votos menos para el dictamen de Movilidad.
Con los votos en contra de Movimiento Ciudadano, PRD y de la diputada sin partido, Fabiola Loeza Novelo, el PAN consiguió la aprobación de «Panzaso», una situación que pudo haber generado algunas consecuencias al interior del partido si no se hubiese aprobado la ley debido a las dos inasistencias de los legisladores.
Ni del PRI ni del PAN
Luego de su renuncia al PRI, la diputada Fabiola Loeza Novelo acompañó al gobernador Mauricio Vila Dosal por una gira que incluyó al municipio de Chichimilá.
Eso llevó a pensar que tras dimitir al tricolor, se estaría acercando al grupo blanquiazul. Pues, el martes no apoyó ni a Acción Nacional ni a sus antiguos compañeros al votar en contra de la ley de Movilidad en lo particular y también rechazar la reforma política.
Loeza Novelo, la legisladora sin partido, ha iniciado un camino espinoso. Al final, la política puede ser un antónimo de soledad y base de su esencia son los acuerdos.
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