¡Todas contra Huacho!
Por Alejandro López Munguía
A pocos días de que comience oficialmente la campaña electoral, la desgracia de Huacho Díaz Mena, candidato a Gobernador de Yucatán por Morena, se profundiza gravemente. El día de ayer por la tarde un grupo de 5 legisladoras de la 4ª Transformación acordaron trabajar para “no dar ni un voto a Huacho” Díaz.
Este golpe le ha causado un dolor más agudo que el de la fractura que obtuvo al maniobrar su ganado. El candidato tuvo un accidente en su lujoso rancho, por lo que tuvo que ser intervenido. Más información en nota aparte.
A iniciativa de la diputada federal, Consuelo del Carmen Navarrete Navarro; se reunieron las legisladoras: Rubi Be Chan “Rubichely”, diputada estatal por Morena; Alejandra Novelo, diputada estatal por Morena y coordinadora de la fracción morenista en el Congreso del estado; Fabiola Loeza, diputada estatal independiente (ex priísta); la diputada federal, Federica Quijano Tapia (vocalista del grupo musical Kabá), y coincidieron en que no es posible apoyar a Huacho Díaz Mena, y mucho menos trabajar electoralmente para ayudarlo a ganar la elección del próximo 2 de junio.
Y ES QUE, CON ELLAS, HUACHO DÍAZ HA SIDO INJUSTO, DOBLE CARA, MAÑOSO Y MENTIROSO. Como se sabe, la diputada Rubichely fue literalmente engañada por el oriundo de San Felipe, ya que en un inicio, acordó con ella impulsarla para que obtuviera la candidatura a la presidencia municipal de Ticul, dándole finalmente la espalda, al imponer como candidato al “Chapulín” priísta Beto Parra, enemigo político de Rubichely.
Huacho no tuvo la atención siquiera de avisarle con tiempo, sino que fue a través de las redes sociales que ella se enteró de la lista definitiva de candidatos. Tenemos conocimiento que la diputada Rubichely encaró a Huacho y éste, simplemente le dio la espalda. Como consolación la metió a la lista de candidatas plurinominales en una ridícula posición, sin que ella estuviera de acuerdo. El candidato quería comprometerla para “callarla”.
Con Alejandra Novelo, Huacho Díaz de plano no tuvo disposición para darle una posición política electoral, siendo que es la Coordinadora de la fracción parlamentaria en el Congreso del Estado. Huacho no tuvo para con ella ninguna atención, de hecho, obstaculizó todo, hasta impedir su acceso a una candidatura.
Con Carmen Navarrete, fue hasta hace unos pocos días que Huacho la llamó y le ofreció una coordinación en su campaña. Ella le preguntó el por qué hasta ahora la llamaba y no desde agosto del año pasado. “Te llamé y lo hice varias veces, sin que me respondieras”, le dijo. Como respuesta, Carmen obtuvo un “rollo mareador”, con el fin de que se subiera al barco. Ciertamente la diputada federal por el V distrito, nunca fue tomada en cuenta por Huacho y lo peor, que al final comprobó que fue él quien se opuso a que ella obtuviera la reelección a la que tenía derecho por el buen trabajo que ha realizado en la cámara a favor de la 4ª transformación que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador. Carmen siempre enfrentó la grilla interna de sus enemigos, actual integrantes del equipo de campaña del flamante candidato a Gobernador por Morena.
Joaquín Díaz Mena no se ha comportado a la altura de las circunstancias con ninguna de las legisladoras que hoy cerraron filas, y le negaron el apoyo para que gane la gubernatura en las elecciones del próximo 2 de junio.
La situación es grave, toda vez que Huacho también ha roto políticamente con dos mujeres muy importantes de la 4ª transformación en la entidad, como lo son la Maestra Alpha Tavera, presidenta de Morena en Yucatán, y Verónica Camino Farjat, senadora de la república y ex aspirante a la candidatura a gobernadora del estado.
Y es que, a partir de que Huacho logró la candidatura al gobierno del estado no ha parado de tener problemas con diversas personalidades y con diversos grupos políticos. Ha casi todos ha fallado, a CATEM, poderosa Confederación Sindical la dejó fuera, al despreciar al líder estatal Manuel Marenco y ofrecerle una pírrica candidatura a regidor en la campaña perdedora de Rommel Pacheco.
Con la imposición de Rommel Pacheco como candidato a la alcaldía de Mérida, provocó la renuncia del diputado Rafael Echazarreta Torres, quien abandonó las filas de Morena para preparar una campaña contra él, para evitar que gane la gubernatura que está en juego.
El capricho de Huacho, originó que surgiera en todo el estado, un movimiento anti Chapulín, organizado por un grupo importante de fundadores de Morena en la entidad. El objetivo principal es negarle todo voto a los candidatos Chapulines, incluyendo al propio Huacho Díaz Mena.
A raíz de las imposiciones de candidatos a presidentes municipales y diputados estatales, Huacho Díaz encara el rechazo de la militancia, que inconforme, se atrinchera a votar y a trabajar en su contra para evitar que gane la elección.
En cambio, a sus allegados como la hoy famosa Shirley, de Bienestar, le ha obsequiado la primera candidatura plurinominal al Congreso del estado.
El hombre se ha metido en graves problemas, al grado de que la Dra. Claudia Sheibaum ha establecido una sana distancia entre su equipo de campaña y la del yucateco.
Ofendiendo al morenismo, Huacho integró su equipo de campaña con priistas de mala fama. Ignoró y excluyó a todo morenista que se le acercó, sometiendo al partido a las decisiones de esos priístas.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador de plano ni lo voltea a ver y cuando viene a Yucatán, lo ignora. Los elogios hacia el Gobernador panista Mauricio Vila fluyen con natural amistad, mientras que, para el candidato de Morena, ni siquiera un guiño.
En las últimas semanas, diversas empresas encuestadoras han dado a conocer la caída de Huacho Díaz, en las intenciones electorales. El tema no es cosa menor, se trata de lo mucho que él ha hecho en contra de los morenistas, que impacta negativamente en la población.
A Huacho se le señala de ser autoritario, soberbio, vengativo, misógino, sabelotodo y engreído. Se siente “gobernador” y cree que va a ganar. Lo peor es que ni siquiera ha comenzado la campaña.